La PEA es resultado de la integración de diversas perspectivas, el análisis de evidencia y los hallazgos presentados que buscan controlar y combatir el fenómeno de la corrupción de forma sistémica, lo que permitirá el establecimiento de acciones concretas y proyectos específicos que incidan de forma positiva en la disminución y control de condiciones que propician la prevalencia de actos de corrupción. Cuenta con 4 ejes estratégicos que cubren las aristas relacionadas a la problemática identificada en cada eje, por lo que su atención debe ser de forma simultánea e integral, evitando el enfoque de forma individual en alguna de las temáticas y por el contrario, sumando desde diversos frentes al combate y control de la corrupción desde el ámbito institucional e involucrando a la sociedad, modificando así la percepción y uso de normas sociales que justifican su existencia.

La estructura temática del diseño de la PEA se sustenta en los 4 ejes estratégicos planteados en la PNA, 4 principios transversales, así como 40 prioridades analizadas y organizadas.

Los 4 ejes estratégicos observados a continuación, son fundamentales ya que los mismos atacan de raíz y de manera concreta, los problemas de corrupción que aquejan el país, contemplando a los ciudadanos y al sector privado a fin crear una cultura anticorrupción y que al momento que los ciudadanos dejen de ser partícipes en actos de corrupción, deja a los servidores públicos que hacen mal uso de sus funciones sin posibilidad de seguir obteniendo beneficios con motivo de su cargo, además de las denuncias realizadas y de las sanciones impuestas por parte de la autoridad, lo que se traduce en la erradicación del problema.